Brasil, Perú y Chile en el centro de las inversiones chinas en Latinoamérica.

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A inicios de los años 2000, China se abrió al intercambio comercial con la firma de 10 tratados bilaterales, tres de ellos en América Latina (Chile, Costa Rica y Perú). Desde entonces, ha trabajado hasta lograr ser el primer inversionista en países de la región por medio de sus compañías estatales y privadas, con aportes por más de US$ 100 mil millones de dolares.

Brasil es el primer mercado donde las empresas del gigante asiático han depositado sus capitales. Entre 2007 y 2021 han invertido más de US$ 70 mil millones en más de 200 proyectos en ese país. Según cifras del Consejo Empresarial Brasil-China, en 2021, las firmas chinas iniciaron 28 nuevos proyectos en la mayor economía latinoamericana, la segunda mayor cifra registrada en la historia de la nación, por un valor de US$ 5.900 millones que representó un alza superior al 200% frente a 2020.

“Las inversiones chinas en Brasil, luego de una desaceleración durante el punto álgido de la pandemia, se reanudaron el año pasado, reforzando la maduración de la relación bilateral. La concentración de inversiones en el sector eléctrico, por ejemplo, refuerza esa visión, ya que las empresas chinas, ya sea que estén o no instaladas en Brasil, conocen el sector, lo que abre espacio para inversiones adicionales. Al mismo tiempo, se establecen nuevas agendas, como lo revelan los nuevos y diversificados proyectos relacionados con la tecnología. Esta es una señal de que el espacio para la expansión de las inversiones está creciendo”, explicó el organismo en su informe anual.

Perú es el segundo mercado destino de los capitales chinos. Más de 170 compañías operaban en el país andino hasta el primer semestre de 2022, cuyas inversiones ascienden a más de US$ 30 mil millones, siendo la minería el sector con mayor enfoque y más diversificado.

En 2021, el volumen comercial entre China y Perú superó los US$ 37 mil millones, mostrando cifras alentadoras frente a 2020. Los principales productos que son exportados al país asiático son el cobre, la harina de pescado y los arándanos.

En esa línea, el embajador chino en Perú, Liang Yu, señaló hace unos meses que tienen «proyectos importantes en diferentes sectores productivos, como por ejemplo el minero, en donde Las Bambas podría aportar el 1% al Producto Bruto Interno (PIB) peruano”, ejemplificó.

Perú se mantiene como principal proveedor de palta en China

Ahora, Chile -otro de los países con mayor inversión-, también se ha perfilado dentro de la estrategia global de “muy largo aliento” del país asiático, según detalló la Cámara Chileno China de Comercio e Industrias (Chicit). “En Chile los grandes inversionistas chinos han venido desplegando un trabajo bastante responsable, de carácter consultivo y exploratorio, que obviamente comenzó de una manera muy tímida, pero que ahora podríamos afirmar que está alcanzando cierta madurez, dentro de los respectivos canales legales”, detalló el organismo.

Asimismo, reveló que, según datos oficiales, las apuestas más grandes del último periodo han sido realizadas por la empresa State Grid Corporation al adquirir CGE y Chilquinta por unos US$ 3 mil millones y más de US$ 2.200 millones, respectivamente. Después se ubica la minera Tianqi, que hace unos años adquirió el 24% de SQM por un total de US$ 4.276 millones

“En los últimos años se ha comenzado a estructurar una interesante ofensiva de grandes corporaciones chinas, públicas y privadas, que han llegado a instalarse en Chile con el fin de adquirir activos clave o de extender sus negocios en la región. Estas inversiones se han concentrado preferentemente en los sectores minero, de energías renovables y financiero. Existe también un gran interés en la búsqueda de oportunidades en los sectores turístico, de infraestructura y de la agroindustria, en donde destaca la presencia de una de las empresas vitivinícolas más grandes de China: Yantai Changyu Pionner Wine”, detalló la Chicit.

Durante el primer semestre de 2022 el intercambio comercial entre Chile y China fue de US$ 34.071 millones.

Fuente: DFSUD